Ninguno estamos a salvo de vernos inmersos en esta situación. Ni siquiera los trabajadores excepcionales o aquellos que llevan largos periodos en una misma empresa. Por esto, desde Astromelias Collies, nos apetece aprovechar estas líneas para acercarte algunos consejos ante un despido improcedente. ¿Sabrías cómo tienes que actuar, los fallos que se suelen cometer o cuáles son los pasos que debemos seguir? Sigue leyendo atentamente.
Un despido improcedente es básicamente la rescisión de un contrato laboral sin acuerdo previo y sin causa justificada. Es decir, aparentemente, el trabajador ha cumplido con todas sus obligaciones y tareas, con el horario acordado, siempre con puntualidad y todos sus permisos o ausencias se dieron bajo los acuerdos del convenio colectivo.
Cuando un despido se da sin una causa justificada, es preciso verificar que realmente haya sido improcedente. Para ello, hay que conocer ciertos factores que determinan si una rescisión del contrato laboral ha sido verdaderamente del tipo improcedente:
- Será considerado improcedente cuando el trabajador no ha sido notificado por escrito de las faltas cometidas que en teoría estarían motivando su despido.
- Un despido será considerado improcedente si no se han podido probar las causas del mismo o carezcan de fundamento. El empleador debe probar que los hechos notificados son veraces y lo suficientemente graves como para justificar el despido.
- Otro factor que puede determinar que un despido sea improcedente es que el trabajador forme parte del comité de empresa o sea delegado de personal.
Pequeños consejos ante un despido improcedente. Hay que saber qué hacer
El primero, y quizá el más importante, de los consejos ante un despido improcedente que podemos daros es que si no estáis de acuerdo con la decisión, presentéis una demanda laboral. Para ello, será imprescindible contar con un especialista en la materia. Busca un buen abogado en derecho laboral en Barcelona, Madrid, Valencia o donde te encuentres para que se encargue de tu defensa jurídica. Tras la presentación, habrá un acto de conciliación. En caso de no ser fructífero, un juez se encargará de dictar sentencia.
Si el despido es declarado improcedente, el empleador tendrá ante sí una decisión que tomar:
- Readmitir al trabajador en su puesto laboral y pagar el salario no devengado hasta la fecha de la sentencia.
- Negarse a readmitir al trabajador. En este caso, deberá hacer frente a una indemnización establecida por el juez.
Como puedes ver, lo más relevante y el mejor de los consejos ante un despido improcedente es mantener la calma en todo momento y ponerse en manos de profesionales. Serán ellos los encargados de guiarte por el mejor camino legal y acercarte todos los recursos necesarios para poder emprender acciones legales.